El Lunes pasado vimos el Mar de los Sargazos, un lugar en el Atlántico donde las crías de las tortugas suelen permanecer hasta que alcanzan la edad reproductiva o madurez sexual.
Todas las especies de tortugas marinas difieren en el tamaño de las crías al nacer, el tamaño cuando son adultas, la esperanza de vida y por lo tanto también varia el tiempo en que cada especie alcanza la madurez sexual. Las tortugas poseen un crecimiento lento y hasta que no alcanzan el tamaño adecuado no se desarrollan sus caracteres sexuales y por lo tanto no comienza la reproducción de la especie.
En condiciones naturales, las tortugas necesitan más años para alcanzar la madurez sexual, pues en mar abierto tienen que pescar y gastar más energía en buscar alimento. Existen especies que son carnívoras y al ingerir mayor cantidad de proteínas pueden presentan tasas de crecimiento mayor que aquellas que son herbívoras. En cautividad, por el contrario la comida le es proporcionada, así que prácticamente toda la energía se puede invertir en crecer. Así que podemos tener tortugas que a los 10 años ya son adultas y comienzan a dejar descendencia, o bien tortugas de ambientes naturales que necesitan más de 30 años para llegar a perpetuar la especie.
La temperatura es un factor que también va ha influir positivamente, así que los ejemplares que navegan por aguas más cálidas alcanzan antes la madurez sexual que en aguas frías.
La presencia de machos puede inhibir la maduración sexual de la hembra y por el contrario la ausencia de este genero puede llevar a un retraso de esta edad.
Así que las condiciones físicas del medio, la disponibilidad de alimento, la competencia y las propias características genéticas de cada especie van a influir en la determinación de la madurez sexual, tal y como sucede con el resto de animales.
Podemos detallas las siguientes etapas de crecimiento de las tortugas:
- Cría: Momento desde que la tortuga rompe el cascarón de huevo, se cierra el cordón umbilical y se reabsorbe el remanente del saco vitelino y pasan a tener una alimentación activa.
- Infantil o juvenil inicial: Las tortugas en esta etapa mantienen una vida pelágica, al igual que su alimentación.
- Juvenil tardía: Se acercan a las zonas costeras y comienzan a tener hábitos alimenticios bentónicos.
- Pre-adulto: En este momento las tortugas comienzan a desarrollar los caracteres sexuales secundarios, sobre todo los machos (es más fácil apreciar esta etapa en los machos que en las hembras). Las uñas crecen más fuertes y con forma de garras y la cola crece y se engrosa, de manera que sobresale más allá de los bordes posteriores de las aletas. El peto se hunde en la parte central y el caparazón se aplana, es decir se hace menos alto y más largo, incluso puede presentar ensanchamiento por los bordes.
- Adulto: Alcanzan una dimensión máxima y cambian su alimentación pasando a alimentarse de más vegetales que de animales.
Es importante recalcar que las tortugas siguen creciendo toda la vida, aunque es verdad que presentan un crecimiento muy elevado hasta la etapa pre-adulto, cuando ya cambia considerablemente, disminuyendo la tasa de crecimiento cuando son adultos, de tal manera que no es posible detectar el crecimiento de un ejemplar con los métodos tradicionales como pueden ser una regla o un metro.
- Tortuga boba (Caretta caretta), 20 años.
- Tortuga carey (Eretmochelys imbricata), 30 años.
- Tortuga laud (Dermochelys coriacea), 10 años.
- Tortuga verde (Chelonia mydas), 45 años.
- Tortuga negra (Chelonia agassizii), 25 años.
- Tortuga golfina (Lepidochelys olivacea), 40 años.
- Tortuga lora (Lepidochelys kempii), 50 años.
- Tortuga de Australia o kikila (Chelonia depressa), 45 años.